SER FRAGANCIA DE CRISTO EN EL MUNDO


"FRAGANCIAS DE CRISTO"

SER FRAGANCIAS DE CRISTO ES ESPARCIR SU FRAGANCIAS DONDE ESTÉS
EN EL LUGAR QUE TE ENCUENTRES CASA,TRABAJO, IGLESIA ,COLEGIO ,EN FACE,
EN TU RED SOCIAL FAVORITA DANDO
TESTIMONIO DE SU PRESENCIA EN TI
¿QUIERES SER TU FRAGANCIAS DE CRISTO?

A TODOS LOS QUE NOS DEJAN ENTRAR EN SU CORAZON
MUCHA PAZ Y AMOR .GRACIAS A LOS AMIGOS POR ESTAR SIEMPRE AHI DISPUESTOS A DAR,
QUE LA PAZ Y EL AMOR DE JESUS NOS SIGA HERMANANDO Y DERRAMANDO BENDICIONES A TODOS







Esperamos ser de Bendicion a tu vida, asi como tu lo seas a nuestras vidas. Te deseamos Un Lindo Dia


sagrado corazon de jesus

jueves, 29 de noviembre de 2012

si llego


Adviento, tiempo de esperanza




Adviento,
tiempo de esperanza,
en el seno de María
crece el fermento
de un mundo nuevo,
el hijo del Dios vivo
que llega a compartir
con nosotros.


Nace Emanuel,
Dios-con-nosotros,
hecho niño,
pobre,
pequeño y necesitado.


María nos enseña el camino
para hacer nacer a Jesús
en nuestro tiempo:
confianza,
entrega,
fidelidad,
coraje,
y mucha fe en el Dios de la Vida.


Tiempo de espera,
de atención y cuidados,
de respeto y contemplación.


Señor,
hay mucho dolor en nuestro tiempo,
hay sufrimiento e injusticia,
ayúdanos a sembrar
semillas de esperanza


Descúbrenos la alegría
de la paciente espera,
activa y fecunda,
comprometida por la vida
de los que nos rodean.


Enséñanos a hacer crecer
la esperanza de algo nuevo,
anímanos a entregar nuestras vidas
para la construcción del Reino.


Es tiempo de espera, Señor,
pero también es tiempo de donación
y compromiso efectivo.


Contágianos la fe sencilla de María,
que dio su vida
para alumbrar el Reino
y hacer nacer la esperanza
en medio de su pueblo.


Salmo de San Francisco de Asís para el tiempo
del Adviento del Señor


¿Hasta cuándo, Señor,
me olvidarás por siempre?
¿Hasta cuándo apartarás tu rostro de mí?
¿Hasta cuándo tendré congojas en mi alma,
dolor en mi corazón cada día?
¿Hasta cuándo triunfará mi enemigo sobre mí?
Mira y escúchame, Señor, Dios mío.
Ilumina mis ojos para que nunca
me duerma en la muerte,
para que nunca diga mi enemigo:
He prevalecido contra él.
Los que me atribulan se alegrarían si yo cayera;
pero yo he esperado en tu misericordia.
Mi corazón exultará en tu salvación;
cantaré al Señor que me colmó de bienes,
y salmodiaré al nombre del Señor altísimo.

No hay comentarios: